Volvemos a las ciénagas de Corsus, donde los clanes enfrentados que habitan la isla se han unido finalmente bajo un mismo estandarte: el de los Iskal. Su lema es sencillo: “Libérate del dolor y la preocupación”. Esta promesa de concordia e iluminación ha conseguido unir a todos los habitantes de estos pantanos de clima abrasador. Y la promesa se ha cumplido: los clanes por fin conviven en paz, tal y como profetizaba la doctrina Iskal. Atrás quedaron las luchas de poder y el hambre; ahora solo existe la iluminación de los Iskal.

“No hay por qué enfrentarse solo a la dureza de la existencia. Los Iskal son un colectivo iluminado que comparten corazón, mente y destino. Juntos, no existe obstáculo que pueda detenernos.”

Los Iskal han alcanzado la prosperidad ajenos a la amenaza de la Raíz, que presenta un peligro constante a los mundos sin Guardián. Cessnya, reina de los Iskal, ha conseguido unir a toda la población, con la excepción de un esquivo habitante que se oculta en un cementerio sagrado. Allí, este superviviente se encuentra a salvo de la "iluminación" de los Iskal, que tienen prohibido el acceso a este territorio sagrado.

Cessnya vuelve a reclamar tu ayuda. Esta vez confía en tu astucia, no en tu fuerza, para convencer al insurrecto de que se una a los Iskal. ¿Ayudarás a Cessnya a cumplir sus deseos o te negarás e intentarás detener a los Iskal?